Las lesiones por la práctica del deporte o actividad física son frecuentes. Ocurren en el 30 porciento de los casos en su práctica regular durante un año. Las lesiones pueden ser intrínsecas (producidas por el propio individuo por un movimiento anormal o un movimiento repetitivo.
También se encuentran las extrínsecas como producto de un traumatismo directo o indirecto.
Su gravedad se clasifica habitualmente en lesiones de primer grado (abarca menos del 30% del órgano), segundo grado (del 34 al 66%) o de tercer grado más del 67 % hasta la ruptura total. El diagnóstico de precisión se establece con apoyo imagenológico (placa simple, ultrasonido, tomografía axial computarizada, resonancia magnética entre otras.
La lesión abarca lesiones articulares, musculares,
tendinosas, óseas o de estructuras anatómicas
relacionadas como discopatías o meniscales entre otras. Son frecuentes las lesiones compuestas, que abarcan dos o mas estructuras.